Se sugiere que para la Segunda Feria Internacional de Arte de Lima (Art Lima), si es que llega a efectuarse, sea organizada por personas más adecuadas y con un criterio y personalidad mucho más amplios que los que han exhibido en su primera edición.
Pero así es la cultura en el Perú: la mayoría de sus intelectuales plagian trabajos de otros y las asustadas ferias de arte se dedican a censurar a sus artistas.
La imagen precedente ha sido fotografiada directamente de la revista Velaverde (29/4/2013)
La siguiente nota periodística salió en Diario 16 http://diario16.pe/noticia/26142-art-lima-vetan-a-artista-espaanol-por-imagen-que-aludaia-al-ejaercito
Alán Carrasco es un artista español que llegó a Lima a exponer la pieza Iconoclasia, trabajo en blanco y negro elaborado para la sección Iniciando Colecciones de Art Lima. Los medios de comunicación lo llamaban “el artista español” y su presencia había generado eco, como cada vez que nos visita un extranjero. Un día antes de la inauguración, una cámara de televisión captó su trabajo expuesto en Art Lima –feria llevada a cabo al interior de la Escuela Superior de Guerra del Ejército del Perú, en Chorrillos–, listo para ser juzgado por los ilustres asistentes que llegarían al día siguiente.
Para la ocasión, la curadora de Iniciando Colecciones, Giuliana Vidarte, le pidió al grupo de artistas integrado por Lici Ramírez, Santiago Quintanilla, Gianine Tabja y Alán Carrasco que oriente su trabajo en el “pasado reciente de la historia peruana”, como reseña Carrasco. Y eso hicieron. Fue entonces que este último decidió trabajar el nefasto papel de algunos miembros del Ejército en el conflicto armado interno. Según indican las evidencias, a los dueños de casa, también llamados anfitriones, no les agradó el mensaje que transmitía Iconoclasia y a última hora ordenaron que sea retirado de la exposición.
“Yo sabía cuál era el recinto y ellos también, pero lo más importante: la organización avalaba el trabajo y trabajaban (o eso decían) con independencia dentro de ese espacio”, manifiesta Carrasco, quien continúa a la espera de las explicaciones pertinentes.
Increíblemente las explicaciones llegaron, pero a través de comentarios de Facebook de la cuenta de Art Lima, los cuales fueron borrados. El primer argumento fue que, siendo el artista de origen español, decidieron retirar su trabajo, pues la sección Iniciando Colecciones estaba orientada a talentos peruanos. Pero como el argumento xenófobo incrementó las críticas, dijeron que la falta de espacio los obligó a retirar deliberadamente el trabajo de Alán Carrasco.
“Siguen sin dar una explicación oficial, y cuando lo han hecho a través de la cuenta de Facebook ha sido utilizando la mentira y la tergiversación. En uno de esos argumentum ad nauseam se mencionó la problemática de mi nacionalidad en un contexto como Iniciando colecciones (diseñado, al parecer, para artistas peruanos), y en otra un ‘particular’ problema de espacio”, lamenta el agraviado.
Aclara que tanto los organizadores como la curadora conocían su nacionalidad desde el inicio, “dato que es fácilmente demostrable si tenemos en cuenta la nota publicada por Art Lima y El Comercio el pasado 22 de abril, donde se me presenta como ‘el artista español’”, resalta.
Por otro lado, el problema de espacio con el que se excusan es incongruente y existen evidencias de ello. Un día antes de la inauguración, el programa “Chema a las 11”, conducido por José María Salcedo, transmitió en vivo desde Art Lima, al interior de la Escuela Superior de Guerra del Ejército.
“Durante el montaje, aparece por unos breves segundos mi pieza colocada en su lugar correcto, con el orden y disposición que yo precisé y en diálogo con la obra de Santiago Quintanilla, como se había conversado. Es decir, el trabajo estuvo colocado y dispuesto para su exhibición hasta el último momento, en que, por razones que sólo Art Lima puede explicar, es retirado de la sección”, indica Alán Carrasco.
Es curioso que en esta ocasión las heridas peruanas dejadas por el conflicto armado interno alcancen a un español, tan ajeno a nuestros traumas noventeros. Pero si algo tiene que agradecerle Carrasco a los peruanos es haberlo tocado con la magia de la censura, que inevitablemente y siempre, para mal de los autoritarios y soberbios, genera el efecto inverso y se convierte en un alto reconocimiento en el país de las caminatas en puntillas y chistares suprimidos.
MILAGROS OLIVERA
molivera@diario16.com.pe
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